La Participación del paciente en la toma de decisiones

Médico de Familia. Unidad Docente de Medicina de Familia y Comunitaria de Córdoba. Médico de Familia. Centro de Salud de Azpilagaña (Pamplona)

Roger Ruiz Moral y Jose Ramón Loayssa Lara

La revista JANO ha publicado un interesante artículo que analiza los puntos débiles de la autonomía,  considerada como el referente de una buena práctica clínica: sus debilidades, dilemas y desafíos

 

En los últimos años, la práctica de una medicina centrada en el paciente (MCP) se ha convertido en algo universalmente aceptado. Este tipo de práctica supone una renovada atención a la persona y a su experiencia de enfermedad. El concepto de participación del paciente en la toma de decisiones o —como mejor se le conoce— toma de decisiones compartidas (shared decisión making) (TDC) ha llegado a constituir, en los últimos años, un campo de estudio y aplicación con entidad propia dentro de la comunicación médico-paciente.

 

Una mayor información puede no ser deseada por algunos pacientes, por ejemplo los que tienen peores pronósticos y los que sienten mucha ansiedad y, por tanto, una mayor necesidad de evitar pensar en la muerte.

 

Desde luego que el compartir decisiones con los pacientes no está indicado en numerosos casos. No todas las decisiones que se toman en medicina deben de partir de la idea de que el médico y el paciente decidirán conjuntamente. Resulta ya clásico el trabajo de Degner y Sloan2 que destacaba que los pacientes de cáncer tienen menos deseos de tomar decisiones que afectan a su tratamiento que una muestra de sujetos tomada al azar. Esto ocurría incluso en situaciones donde había equilibrio entre opciones. Y cuando los pacientes toman decisiones irracionales, con pobre evidencia, o incluso potencialmente dañinas, lo que tiene que hacer el médico no es compartir decisiones, sino disuadirlos.

 

La enfermedad, como cualquier fuente de alarma, activa la búsqueda de protección y soporte psicológico. Cuanto mayor sea el impacto de la situación de peligro, mayor es la tendencia de los sujetos a renunciar a su autonomía para ponerse en manos de una figura de apoyo.

 

 

 

 

*La perspectiva aquí expuesta se enmarca en una línea de investigación desarrollada en los últimos años por nuestro equipo de investigación del grupo Comunicación y Salud que ha recibido financiación del FIS (PI050527 y PI07/90742) la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía (0147/2005) y la SAMFYC.

 

>> Puede leerse el trabajo completo aquí.